¿Qué es un dominio web?

Un dominio web es necesario para que un usuario recuerde tu sitio, para que un buscador pueda listarlo, y para crear una imagen y marca que lo distinga sobre el resto, por ello es muy importante entender bien qué es y cómo se compone.

Los dominios web son un elemento de vital importancia en el mundo de Internet, los cuales toman un papel muy relevante al momento de atraer clientes.

Sin ellos, sería muy difícil acceder a los sitios web, tendríamos que tener una muy buena memoria o un tipo de documentación propia donde relacionáramos las direcciones IP de los sitios con el tipo de contenido que despliegan.

En pocas palabras, un dominio web es el nombre único que se le da a un sitio para que de esa manera pueda ser identificado y visitado de manera sencilla.

Imagina que estos dominios web son como los contactos que guardas en tu teléfono, en vez de tener que recordar todos y cada uno de los dígitos que componen la cadena de números, basta con recordar el nombre de la persona a la que está asociada ese número y marcarle utilizando dicho nombre.

De igual manera ingresas al contenido del sitio recordando únicamente el nombre de dominio, en lugar de tener que memorizar todos los dígitos de la dirección IP.

Cómo funciona un dominio en Internet

Tal como se da con los números telefónicos, existen empresas que se encargan de alquilar dominios a personas o compañías específicas. Si deseas adquirir un dominio, deberás contactar a una web para comprar dominios, la cual te permitirá hacerte de un nombre único que estará relacionado con la IP del servidor donde alojas el contenido de tu sitio.

Anatomía del dominio

Un nombre de dominio está formado por una serie de componentes, cuya combinación hace único a cada uno de ellos. Conocer bien la anatomía de un dominio, te permitirá jugar con dichos componentes y lograr obtener un mejor dominio para tu sitio.

Los dominios pueden llegar a estar compuestos por hasta tres partes:

• el nombre,
• la extensión,
• el código de país.

Siendo esta última totalmente opcional o sustituida por la segunda parte.

Por ejemplo, si tenemos el nombre de dominio “amazon.com.mx” en este caso el nombre es “amazon”, la extensión es “.com” y el código de país es “.mx”. Sin embargo esta misma compañía eligió el dominio “amazon.es” para su sitio en España, omitiendo el “.com” y añadiendo directamente el código de país “.es” como extensión.

De esta manera, se puede buscar la combinación adecuada para obtener el mejor dominio, siempre teniendo presentes las costumbres, leyes y tradiciones de cada país el momento de elegirlo.

Diferencia entre hosting y dominio

Uno de las principales puntos que se deben establecer es que un dominio no es lo mismo que un hosting, al adquirir un dominio te haces de un nombre, adquieres los derechos sobre él y puedes hacer con él cualquier actividad legalmente posible, incluso no hacer absolutamente nada y simplemente tenerlo ocupado.

Cuando usamos la palabra hosting, nos referimos al lugar donde se almacenan todos los archivos que necesita una página web para funcionar, de igual manera en él se pueden gestionar las bases de datos y las cuentas de correo electrónico asociadas a tu dominio.

Diferencia entre url y nombre de dominio

A un nivel básico puede parecer que ambos conceptos hacen referencia a lo mismo, sin embargo no lo es así.

Por otro lado la URL (Universal Resource Locator), es la dirección total de la página a la que queremos acceder, la cual está compuesta hasta cierto punto por el dominio, pero también cuenta con otras partes.

Al principio de la URL encontramos el protocolo, generalmente “http://” o su versión segura “https://”, también podemos encontrar un subdominio que nos ayude a ir a una parte más específica, quizás un puerto como “:8080” o algún parámetro como “?param=123” que nos permita realizar alguna acción.

Diferencia entre dominio y subdominio

Basándonos únicamente en los nombres de los elementos podemos definir su relevancia, un dominio es un elemento independiente que se encarga de definir una marca única, una imagen de una empresa o producto, su uso no depende de otros, y para el visitante es la raíz del proyecto.

Por otro lado, un subdominio es dependiente del dominio, sin él no existe.

Generalmente están relacionados con algún contenido en específico, son más utilizados para mostrar páginas de lanzamiento de productos o promocionar algún servicio, generalmente están compuestos por palabras cortas y no es necesario realizar una inversión extra para obtenerlos.

¿Registrar un dominio o comprar un dominio?

Al adquirir un dominio lo que haces es registrarlo bajo tu nombre, ahora todo lo que se muestre en él está bajo tu responsabilidad y tienes los derechos de hacer uso total de dicho nombre.

Una vez vencido el plazo de tu contrato, deberás renovarlo para seguir teniendo los mismos derechos sobre ese nombre.

¿Si registro un dominio ya tengo página web?

La respuesta corta es “No“, al registrar un dominio únicamente te estás haciendo de un nombre que será la presentación de tu sitio, sin embargo el contenido, estructura, enlaces, imágenes, etc. tendrán que ser realizados por ti en un servidor dedicado exclusivamente a eso.

Una vez que tengas montado tu sitio en un servidor, podrás hacer que tu nombre de dominio apunte a dicho servidor y de esa manera se pueda mostrar tu contenido.

¿Por qué se crearon los dominios web?

Todos los ordenadores del mundo cuentan con una dirección IP única, la cual está compuesta por una serie de números y puntos.

Dicha IP es el elemento primordial necesario para poder establecer una comunicación entre un equipo y otro, por lo que basta con recordar la IP de un servidor para poder visitar el sitio que aloja.

Este sistema se distribuye sin un servidor único o principal, simplemente consiste en una lista compartida entre todos los servidores.

De esa manera cuando quieres acceder a cualquier sitio web, tu ordenador se pone en contacto con el servidor de nombres de dominio con el que está asociado y obtiene la dirección IP asociada con dicho nombre, para de esa manera poder establecer la conexión.

Tipos de dominios (extensiones)

Como podrás haber notado, no todos los dominios web tienen la misma anatomía, hay quienes siguen una fórmula distinta dependiendo del país donde se encuentren o el rubro al que se dedican.

Si bien los dominios “.com” son los más codiciados y reconocidos, existen muchas otras opciones que pueden dar a tu sitio el reconocimiento necesario.

Dominios de nivel superior (top level domains TLD)

Tal como su nombre lo indica, un dominio de nivel superior es el que se encuentra en el nivel más alto del sistema de dominios de Internet.

Dentro de esta categoría se engloban todos aquellos dominios que concluyen con una de las extensiones más conocidas, tales como “.com” o “.net“.

Cuando hablamos de un TLD, básicamente nos referimos a la última parte que compone un dominio, por ello un TLD puede estar formado por un ccTLD o un gTLD, todo dependiendo de la composición que se le quiera dar al dominio, y de existir una combinación de ambos se logra la conjunción de un dominio de segundo nivel.

Dominios de nivel superior de país (country code top level domains ccTLD)

El uso de este tipo de extensiones normalmente está restringido y limitado únicamente ciudadanos o empresas que residen en dicho país, sin embargo existen claras excepciones a la regla como por ejemplo el caso de Tuvalu, quien venden sus dominios “.tv” para que puedan ser utilizados por empresas relacionadas al mundo del entretenimiento.

Dominios de nivel superior genérico (generic top level domains gTLD)

Los dominios de nivel superior genérico, también conocidos como dominios de primer nivel o extensiones genéricas, son la parte del dominio que determina la categoría a la que pertenece.

Al hacer uso de una gTLD estamos indicando que nuestro sitio pertenece a una categoría específica, como por ejemplo al área comercial, educativa, gubernamental, información, entre otras opciones. De esa manera podremos estar dando información sobre el sitio desde antes de que se ingrese a él.

Actualmente existen más de 250 dominios de alto nivel, sin embargo la extensión más conocida es el “.com”, entre las más representativas encontramos el “.edu”, “.org”, “.net”, “.gov”, “.info”, etc.

De igual manera existen una serie de nuevas gTLDs que se han ido sacando con el paso de los años, como por ejemplo “.tech”, “.top”, “.store”, etc.

Si bien estas son menos utilizadas en la actualidad, son de gran utilidad para expresar mejor de qué trata tu negocio, empresa o marca.

Dominios de segundo nivel

Cuando un dominio se encuentra después de otro en una URL, entonces es catalogado como dominio de segundo nivel.

Normalmente este nivel es utilizado para referirse a un código de país, el cual se añade después de una extensión genérica. Por ejemplo, “amazon.com.ar” en este caso “.ar” seria el dominio de segundo nivel.

Este tipo de dominios es muy utilizado en páginas asociadas al gobierno de cada país y a los sistemas educativos, por ello es muy común encontrar direcciones con dominios que terminan en “.gov.uk” o “.edu.pe”, etc.

Subdominios

Generalmente son utilizados para añadir divisiones dentro del mismo sitio, y pueden apuntar directamente a algún directorio dentro del servidor. Son ideales para el uso de landing pages, campañas, promociones o simplemente para mostar algún contenido especial que debe mantenerse separado de la página principal.

Por ejemplo, “google.com” tiene un subdominio llamado “mail.google.com”, el cual apunta a la bandeja de entrada de gmail, de esa manera Google no tuvo que adquirir un dominio totalmente separado para mostrar su administrador de correo.

Cómo registrar un dominio

Para poder registrar un nombre de dominio y que éste esté asociado a tu contenido, debes acudir a un registrador, es decir a una empresa cuyo giro consista en dar el servicio de alquiler de nombres.

Una vez que has encontrado la empresa que mejor se adapte a tus necesidades y gustos, deberás buscar el nombre que quieres, para de esa manera verificar que no ha sido registrado por alguien más, y de no estar tomado podrás registrarlo.

Al registrar el dominio, el proveedor se encargará de crear un registro único y después inyectará el dominio en el gTLD (Dominio de nivel superior genérico).

Organizaciones de gestión de los dominios web

El control de los registros de dominios lo llevan a cabo organizaciones como IANA, que es parte de la ICANN. La ICANN es una organización sin fines de lucro responsable de mantener la “lista maestra” de nombres de dominio.

Dada su naturaleza, venden nombres a precios sorprendentemente baratos y sólo requieren una tarifa de renovación a un precio razonable.

Sin embargo, la mayor parte del tiempo otras compañías compran el mayor número de dichos nombres de dominio, esperando que alguien más muestre interés y vendiéndolo por mucho más dinero.

Registradores oficiales de dominios

Un registrador oficial de dominio es una empresa inscrita en ICANN, la cual se encarga de preservar los datos de los registros que ha realizado.

Los precios que maneja cada registrador varían según la oferta del mercado, el tipo de nivel del dominio y su popularidad.

Puedes encontrar que los precios varían de un registrador a otro para el mismo dominio, lo importante es entender bien que clase de servicio se está adquiriendo e identificar a que somos acreedores al momento de realizar el pago.

Cómo transferir un dominio web

Si un dominio ya se encuentra bajo tu control, puedes venderlo para ceder dicho control sobre el dominio, o cambiarlo de un registrador de dominios a otro. De ser esta tu voluntad, deberás tener en mente una serie de reglas a cumplir antes de hacerlo.

1. Primero que nada el sitio deberá llevar más de 60 días registrado o tendrán que haber pasado más de 60 días desde la última transferencia.
2. No debe estar en estado de redención o pendiente de eliminación.
3. Debes contar con el código de autorización de tu dominio (conocido como EPP) y todos los detalles de propiedad deben ser válidos.

Generalmente se opta por transferir un dominio web cuando se busca tener todos los servicios en un sólo lugar, es decir, tanto hosting como dominio con un mismo servidor.

Conclusiones

Un buen dominio web es indispensable para lograr avanzar en el competitivo mundo del Internet, si lo eliges bien, tu sitio podrá ser accedido de manera más sencilla y la gente podrá recordarlo más fácilmente, esto es fundamental si queremos causar un buen primer impacto en nuestros visitantes.

Elegir un buen proveedor de nombre de dominio te hará la tarea más simple, busca alguien que inspire confianza y que te permita manejar tranquilamente los derechos sobre el nombre que elegiste.